1. El Tarot es una unidad. Los arcanos mayores y menores hacen parte de un todo, no son sistemas apartados.

2. En la palabra Tarot está contenida la palabra Torá, el texto que constituye la base del judaísmo. También está la palabra Rota, que nos invita al movimiento y 21 palabras sagradas más.

3. Como todo lo sagrado no sabemos exactamente cuándo y quién creó el Tarot. Muchos dicen que fue en la Edad Media, en Italia, y que de ahí pasó a la región de Marsella, en Francia. Pero también hay pistas que indican que ya se conocía en Egipto y en los tiempos de la Atlántida.

4. El Tarot no es brujería ni tampoco se ideó como una herramienta para adivinar el futuro.

5. Los 22 arcanos mayores te proponen un profundo camino por 22 estados de conciencia.

6. El Tarot siempre se lee en el momento presente y no solo contesta preguntas, también las hace.

7. No importa si sacas una carta con la mano derecha o con la izquierda, el inconsciente nunca se equivoca.

8. No esperes que una lectura de Tarot te solucione tu vida o te diga lo que tienes o no tienes que hacer. El encuentro con el Tarot te contacta con una búsqueda psicológica más profunda que te invita a tomar, con conciencia y valentía, tus propias decisiones. Te ayuda a tomar responsabilidad sobre tu vida.

9. Cada arcano contiene un don y un secreto.

10. Ir a una lectura de Tarot es asistir a un encuentro contigo mismo.