“Se va a aburrir mi pareja porque ya no quiero tener sexo”. ¿Se te ha pasado esto por la cabeza? Muchas nos cohibimos al hablar sobre este tipo de temas, y más cuando se trata sobre perder el deseo sexual. El aceptar y reconocer que necesitas ayudar es un paso que a veces nos cuesta un poco. Pierde el miedo e identifica cómo recuperar el deseo sexual ¡Te traigo unos tips para que enciendas otra vez las cosas allá abajo!
 

Arranquemos por una de las bases del sexo, las relaciones. Todas las relaciones comienzan por la fase de enamoramiento, que puede durar entre 18 a 24 meses, donde todo es nuevo, todo es especial, todo es adictivo, todo lo quiero conocer, todo me genera placer, tanto de mí como del otro. Durante esta etapa, en el cuerpo se crean sustancias, un cóctel químico, se produce más dopamina y norepinefrina, dos estimulantes que te generan euforia, energía, ansiedad y deseo por estar en contacto con la otra persona. 

En esta fase estás mostrando lo mejor de ti, tu faceta más hermosa y ambos están al 100%. Están construyendo en su imaginación lo que se supone que quieren que pase en la relación. Si te pones a pensar bien, esta etapa inicial se basa en “Me gusta mucho, no sé para donde voy, no l@ conozco bien, pero no importa. Me gusta, estoy explorando, todo esto es nuevo, quiero seguir”, estás disfrutando el presente, el momento y por ende el deseo sexual está disparado. Pero adivina, esta etapa tiene un fin cuando entramos en la estabilidad y la novedad se termina, la relación comienza a transformarse, incluido el deseo sexual. 

Te preguntarás ¿Pero Yeye, la falta de deseo sexual es psicológica o física? ¿Cuál es la causa como tal? La pérdida de este aspecto clave en la relación se ve afectada por todas las áreas; física, mental y emocional. Te puede afectar un medicamento que empezaste a tomar u otra condición física que desconoces, por esto, como suele ser un área importante, puede verse afectada por distintas variables y es la primera que se recomienda revisar. Después podemos pasar al área emocional ¿Cómo estás? ¿Cómo te sientes hoy? ¿Qué está pasando en tu vida? ¿Hay algo nuevo? ¿Cómo está tu relación y comunicación con tu pareja? ¿Cómo está tu relación y comunicación contigo, te estás escuchando? Y en el area mental estan todos los pensamientos, historias y creencias con respecto a la sexualidad, ¿Cómo es mi relación con el sexo? ¿Qué es el sexo en pareja? ¿Qué pienso sobre el tema? ¿Cómo es la relación con mi cuerpo? ¿Qué tanto me conozco? Estas dos últimas áreas, por lo general, son las que llevan una carga más grande en cuanto a la pérdida del deseo sexual. Es decir el deseo sexual se puede ver afectado por todas, pero el área mental o emocional son a las que menos le prestamos atención, siempre podemos acudir a revisar nuestra condición física, es normal ir donde el médico, pero ir a terapia, ir donde un psicólogo sigue siendo tabú en nuestra sociedad. 

¿Adivinen qué más nos afecta? El periodo. Sí, la menstruación nos da nuestros altos y bajos en este tema, a diferencia de los hombres nosotras somos cíclicas ¿Han notado que desde que nos llega, y durante los siguientes 12 a 14 días, las ganas de tener sexo se incrementan? El ciclo menstrual nos afecta el deseo sexual y si aprendemos a conocernos, vamos a poder aprovechar estos lapsos de la mejor manera. Para que te hagas una idea, si identificas que los próximos 5 a 7 días después de que ya no te baja más, tienes más ganas de tener sexo, programate y permite que en esos días tu libido te haga ver estrellas. Sácale provecho a tu ciclo menstrual, que ya no lo veas como un dolor de cabeza sino como tu gran poder. 

En mi experiencia, puedo decirte que la parte emocional y la comunicación son fundamentales para el deseo sexual. Nosotras las mujeres tendemos a darle prioridad a las emociones y para nosotras abrir nuestro corazón, estar en disposición y querer estar con otras personas, debemos sentirnos bien emocionalmente. Si nos sentimos ansiosas, estresadas, presionadas vamos a estar sexualmente desconectadas, es muy difícil disfrutar y crear una conexión sexual cuando no estamos en un modo relax. 

¿Cómo abordar el tema de la falta de deseo sexual con mi pareja?

Soy partidaria de la terapia, los cursos, los talleres y cualquier espacio que nos ayude a construir una buena comunicación. Hemos estado restringidos a la educación sexual y sabemos muy poco de la relación con nuestro cuerpo. Sin este conocimiento es complicado saber qué quiero y qué quiere mi pareja, y no hablo solo de sentarse a leer un libro  sobre  sexo, sino a  que debemos explorarnos, comprometernos a crear espacios de intimidad y apertura, el sexo es para disfrutarnos y el proceso de autodescubrimiento es lo que mas puede darte respuestas para que puedas tener una vida dexual placentera ¿Qué más hay? ¿Quién soy yo? ¿Que me erotiza? ¿Que me gusta en el sexo? 
 

Habla con tu pareja. Date la oportunidad de tener un espacio donde conversen de lo que sienten con respecto al sexo, esto no es nada raro. Si se comunican con claridad, curiosidad y transparencia tienen la oportunidad de saber qué es lo que quieren, para dónde van, qué van a recibir y dar, y el deseo sexual se puede reavivar. Si no hay una buena comunicación fuera de la cama, será muy difícil crear un lazo en esta que los una.

¿Cómo recuperar el deseo sexual?

Según el modelo propuesto de respuesta sexual humana por la Sexóloga Helen Kapla, iniciamos con la fase de deseo que se refiere al apetito sexual, las ganas o el interés que puedes sentir por un encuentro sexual. En ocasiones este lo puedo sentir en mi cuerpo, o recrearlo en mi mente y es mi inyección para actuar y buscar un espacio de masturbación con o sin mi pareja. Pero no siempre es así, los besos, las caricias, las palabras lindas, las actividades que te hagan sentir deseada y te exciten, pueden ser el disparador de tu deseo sexual, no siempre tienes que sentir ganas al inicio. 

¿Quieres tips para que tu sexo sea mejor que lo que ves en peliculas?

1. Conéctate contigo misma, te vas a proponer darle un lugar especial a tu sexualidad, donde te exploras, te cuestionas y aprendes de ti como ser sexual y erotico. Luego lo compartes y lo comunicas con tu pareja. 
2. Dale prioridad a tu vida en pareja, no dejes que otras actividades como el trabajo te lleven a perder este espacio y que el sexo sea lo ultimo en la lista. Así no te va a funcionar. Crea espacios en todos los aspectos de tu vida para compartir, todas las áreas son importantes. El espacio en pareja es fundamental para construir intimidad. 
3. Haz tu lista de “¿Qué me prende?” y “¿Qué me apaga?” sexualmente. Toma cada uno de los sentidos: vista, olfato, gusto, tacto  y oído. Explorate, qué te gusta y que no. Intercambia esta información con tu pareja.
4. Seamos realistas, a todo le dedicamos un presupuesto menos a disfrutarnos en pareja y a la intimidad. Dale un espacio en tu bolsillo a la salida a un motel, a la cena l@s dos sol@s y a la botella de vino. Si lo tienes presupuestado será más fácil contemplar estos espacios. 
5. No te dejes perder en el día a día, aterriza tus pensamientos y ten en cuenta que todos somos seres humanos y cargamos con diferentes problemas, fortalezas, heridas y grandes situaciones por sanar. Por esto debemos procurar ser empáticos con nuestra pareja y aprovechar toda esta realidad para ponerla a nuestro favor para la relación, activa la escucha. 

La comunicación es clave en el sexo y conectarte con tu pareja es lo mejor que puede existir. Ya sabes, si algo no te gusta, identificar lo que te excita y te activa el deseo sexual, es muy importante comunicarlo. Si no lo sabes, manos a la obra, descubre qué más hay en este mundo del sexo y encuentra lo que te calienta. ¡Atrevete! El sexo es para deleitarnos y disfrutarnos. 

Portada: Vogue