Todas las personas consumen alimentos para satisfacer sus necesidades de energía y nutrientes, que varían en función de la edad, el sexo, la estatura, el peso, etc. ¿Por qué es una necesidad básica para el ser humano la alimentación? Los seres humanos, al igual que el resto de los seres vivos, necesitan, además del agua que es vital, una alimentación variada y equilibrada que es fundamental para la vida. Una dieta correcta debe contener cantidades adecuadas de proteínas, carbohidratos, fibras naturales, vitaminas y minerales. Las necesidades humanas fundamentales son las mismas en todas las culturas y en todos los períodos históricos. Lo que cambia, a través del tiempo y de las culturas, son la manera o los medios utilizados para la satisfacción de las necesidades.

La alimentación ha sido una importante fuerza selectiva en la evolución humana. Los primeros homínidos obtenían energía y proteínas de frutas, verduras, raíces y nueces. La transición de la vida arbórea a las llanuras fue posible gracias a la emergencia de la postura erecta, la piel lampiña con numerosas glándulas sudoríparas y el color oscuro. Este cambio amplió el radio de acción de los humanos primitivos y favoreció la adopción de prácticas de alimentación más eficientes como la carroñería, la cacería y la antropofagia. El Cro-Magnon y otros humanos modernos, dependieron más de la cacería de grandes mamíferos, lo cual aumentó considerablemente la proporción de carne de la dieta. 

Abraham Maslow habla de que cada necesidad inferior debe ser satisfecha antes de que el individuo pueda satisfacer las demás. Para algunos individuos, debido a sus circunstancias, es muy difícil satisfacer incluso las necesidades más inferiores. Un individuo que tenga demasiado interés por el alimento difícilmente podrá estar interesado en objetivos espirituales. Sin embargo, a mayor capacidad de desarrollo, mejor salud psicológica y autorrealización demostrará el individuo.

Las necesidades humanas se manifiestan a través de conductas, las cuales son la expresión de dichas necesidades. Las conductas sociales y las experiencias son propias de cada sujeto, de allí la dificultad de poder descifrar realmente el verdadero desequilibrio, ya que, dependiendo de cada persona, es posible considerar conductas encubiertas. De esta forma, la conducta constituye la manifestación de que hay una intención y una acción para lograr la meta, y que es, a su vez, delimitada por el requerimiento personal, en términos de la satisfacción esperada.

La necesidad es satisfecha cuando la persona, ha tomado conciencia de dicha necesidad, organizando y dirigiendo su conducta hacia el logro de su meta y encontrando el requerimiento exacto, en calidad y cantidad. Si una persona no ha satisfecho su necesidad de alimentación, no podrá dedicarse a estudiar, a hacer actividades de autocuidado o a compartir socialmente con los demás.

En Health Coaching se usa el Círculo de la vida que representa los alimentos primarios para averiguar qué alimentos primarios están desequilibrados o necesitan más atención.  Todo lo que te apasiona es probablemente un alimento principal para ti, que sustenta tu vida y, como resultado, tiene el potencial de afectar tu salud.

Entonces, siempre que no te sientas saludable, o algo se sienta "mal", podría ser el resultado de un desequilibrio. Un desequilibrio de tus alimentos primarios o secundarios… y todos sabemos que, si algo no va bien en la relación o en el trabajo, puede provocar cambios en el estado de ánimo y, muy probablemente, en los antojos que experimentamos durante el día, problemas digestivos, acné o erupciones y una serie de otros problemas físicos muy reales.

Cuando revisas todos los aspectos de tu vida, por ejemplo, ¿eres feliz en tus relaciones? ¿Qué tan satisfecho estás en tu carrera? ¿Practicas alguna espiritualidad o religión? ¿Y estás ejercitando tu cuerpo? ¿Quizás simplemente te estás esforzando demasiado? Todos estos factores contribuyen a tu sentido general de realización y satisfacción, y a tu salud.

Y cuando estés adecuadamente alimentado con estos, encontrarás que te preocupas mucho menos por la comida y disfrutarás de los beneficios que brinda el equilibrio.

Geneen Rooth en su libro - Cuando la comida es amor- , expresa que ¨Cuando comes sin tener hambre, estás usando la comida como una droga, para lidiar con el aburrimiento o las enfermedades o la pérdida o el dolor o el vacío o la soledad o el rechazo. La comida es solo el intermediario, el medio con el fin de alterar tus emociones, de volverte insensible. De crear un problema secundario cuando el problema original se vuelve demasiado incómodo. De morir lentamente en lugar de aceptar tu desordenada, magnífica y muy, muy corta, incluso a los cien años, vida. El medio para estos fines es la comida, pero podría ser el alcohol, el trabajo, el sexo o la cocaína, navegar por Internet o hablar por teléfono. 

Por una variedad de razones que no comprendemos completamente (genética, temperamento, medio ambiente), aquellas personas que son comedores compulsivos eligen la comida. No por su sabor, no por su textura ni por su color, quieren cantidad, volumen. Necesitan mucha de ella para volverse inconscientes, para acabar con lo que está pasando. Lo importante es la inconsciencia, no la comida.

A veces la gente dice: “Pero me gusta el sabor de la comida, de hecho, ¡me encanta el sabor! ¿Por qué no puede ser tan simple? Como en exceso porque me gusta la comida ". Pero… Cuando te gusta algo, le prestas atención. Cuando te gusta algo, amas algo, te tomas un tiempo para ello. Quieres estar presente durante cada segundo del acto. Comer en exceso no conduce al éxtasis, lleva a eructar, exceso de gases e incluso a estar tan enfermo que no puedes pensar en nada más que en lo lleno que estás. Eso no es amor propio; eso es sufrimiento.

Antes de comer pregúntate ¿Cómo me quiero sentir después de comer?¿Quiero alimentar mi cuerpo o solo llenar un vacío?

Foto: Joshua Rawson Harris