¿Eres una persona tímida? ¿Muchas veces no das tu opinión aunque quieras darla?¿Piensas mucho antes de hablar y las demás personas creen que eres insegura? ¿Rechazas invitaciones sociales y la gente piensa que eres rara? Tranquila, te traigo 7 estrategias que te pueden servir para superar esa timidez.
Una cosa es ser introvertido y tomar la decisión de no querer estar con gente, de preferir ambientes más calmados contigo misma. Pero por el otro lado la persona tímida que no le gusta porque no lo quiere pasar mal y no sabe cómo actuar, pero le gustaría poder ir, todo por miedo a ser juzgado de forma negativa. Generalmente estas personas tienden a sentirse incómodas, les produce angustia y ansiedad esas interacciones sociales cuando se trata de conocer gente nueva o estar con gente desconocida. El tímido se siente mal por serlo, siente que de alguna manera delimita sus relaciones sociales y le gustaría ser más abierto. Estas estrategias te van a ayudar a aprender a desenvolverte en este ámbito social y comunicativo.
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Las etiquetas. Para mi es primordial e importante empezar por esta, quitarnos toda clase de etiquetas. Deja de recargarte, deja de coger el rol y cargarte con años con “Soy tímida”. Tenemos la tendencia de pensar que el ser tímido es algo negativo, pero tiene también sus cosas positivas. Una persona tímida no le gusta ser el centro de atención, así pues tiende a ser más observador y tiene una mejor escucha activa. Al final, piensa que si todo el mundo quiere hablar ¿Quién escucha? ¿Quién comprende? ¿Quién legitima lo que le pasa al otro?
Preparación. Como todo aquello que no dominamos y más si esa creencia está prevaleciendo que no tenemos habilidades comunicativas, tendemos a quedarnos callados porque no la hemos trabajado lo suficiente. Por eso es importante empezar a trabajar esta parte preparándote al máximo. Una persona que tiene buena comunicación es porque seguramente ha pensado eso en casa y lo ha preparado en algún momento, se ha planteado qué podría responder. Por esto, es importante que analices las diferentes opciones y tengas preparada una respuesta ante eso, para que te sientas más libre en el momento de dar tu opinión o defender lo que querías, y evitar sentirte mal o devaluado. Piensa ¿Qué objetivo tengo en esta conversación? ¿Qué quiero conseguir en esta conversación? ¿Qué puede responder mi interlocutor? ¿Qué puedo responder yo? Ante algo que no controlamos, como siempre, la preparación.
Deberías ver los cambios tan potentes que dan mis clientas con unas pocas sesiones, la preparación lo es todo.
Acción. Tienes miedo y te da vergüenza, pero tira hacia delante. Al final, ¿Cuántas oportunidades has perdido por no decir lo que pensabas o por no tomar la iniciativa? Con miedo o con nervios, lo importante es dar ese paso. Una pregunta que nos puede ayudar es ¿Qué es lo peor que puede pasar? De verdad, el miedo es normal, la inseguridad es normal, así que deja de bloquearte y quedarte en la zona de confort. Házlo con miedo.
Empieza por lo simple. Lo importante es dar ese paso desde lo más pequeño, busquemos lugares controlados donde podamos poner en práctica esa parte de romper con la timidez y vergüenza. Nos podemos empezar a ayudar con amigos o personas que conozcamos, yendo a un evento externo a ti con un amigo, no tendrás presión por hablar con los demás, porque vas de invitado, y aprenderás de los demás a conocer gente nueva. Dar pequeños pasos controlados, empezar a salir de tu zona de confort y ponerte metas pequeñas.
Creencias. Identifica esas creencias o mantras limitantes que te andas repitiendo y por lo cual eres tímida; me veo rara, me veo como una boba, la gente ya se dio cuenta que soy tímida, soy invisible, entre otras. Vamos a cambiarlas por algo que te sirva, que te impulsen para sentirte mejor. Si entras a un lugar y te das cuenta que se están riendo ¿Por qué pensar que se rien de ti? Mejor si piensas: qué gente más divertida. Si nadie se acerca a hablarte, pregúntate por qué y mira cómo puedes entrar tú a las conversaciones.
Lenguaje corporal. Debes tener presente el lenguaje corporal que estás mostrando a los demás, probablemente te estás mostrando cerrada ante las conversaciones o indispuesta. Esto lo único que te va a llevar es que la gente no se acerque a ti. Evita crear bloqueos ante los demás, muestra una postura abierta, evitando cruzar muchos los brazos o piernas, y dando la espalda a la gente, la postura abierta se muestra abriendo el pecho, de forma asimétrica, mostrando las palmas de las manos, si quieres que vengan, no cierres tu cuerpo.
No lo hagas por ti, hazlo por ellos. Deja de poner la atención en ti y cómo te sientes en un evento social con tu timidez y ábrete a los demás. Si llegas a un lugar y no preguntas a los demás como están, lo que hacen y entablas conversación, el otro no se va a sentir bien tampoco y va a pensar que eres seca o antipática. Hacer preguntas y cumplidos es algo muy positivo, así que toma las riendas, pasa a la acción, sé amable.
A la hora de hablar no te centres en ti, céntrate en el otro. No juzgues a las demás personas por su timidez, no sabes realmente qué hay detrás de esa barrera ni que tipo de etiquetas se ha puesto para volverse así. Creeme, vas a terminar encontrando ese match y ese click que necesitas en tus eventos sociales. ¡Arriesgate y ábrete a esta nueva forma de conectar!
Portada: Egeis99
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