Nadia Sánchez

En el vibrante y desafiante panorama del activismo y la promoción del empoderamiento femenino, surge una figura inspiradora que ilumina el camino hacia la igualdad y la justicia social. Nadia Sánchez, fundadora y líder visionaria detrás de She Is, ha dedicado incansablemente su vida a construir puentes y tender manos solidarias a mujeres y niñas en Colombia, especialmente a aquellas que han sido afectadas por el impacto devastador del conflicto armado. Con una pasión ardiente por hacer posible lo imposible y una determinación inquebrantable para romper con los estereotipos de género, Nadia ha erigido un bastión de esperanza y oportunidad en medio de la adversidad. 

She Is no es simplemente una organización, es un movimiento, una voz colectiva que eleva los sueños y las aspiraciones de las mujeres colombianas, ofreciendo un refugio seguro donde la resiliencia y el crecimiento personal florecen. Desde sus humildes comienzos hasta su impacto actual, Nadia ha demostrado que el empoderamiento no conoce fronteras ni límites, y que juntas, las mujeres tienen el poder de transformar el mundo en uno más equitativo y lleno de posibilidades. Su visión audaz y su liderazgo inspirador son un faro de esperanza en un horizonte marcado por desafíos y oportunidades, recordándonos a todos que el cambio verdadero comienza cuando nos atrevemos a soñar en grande y actuar con valentía. Por esto, es un honor para nosotros presentarla cómo una de nuestras MUSAS en nuestro mundo PANDORASCODE, cómo un ejemplo de cómo los esfuerzos, la perseverancia y la pasión nos puede llevar a cumplir nuestros sueños. 

PC: ¿Cómo comienzas tu día?

NS: Comienzo muy temprano porque tengo un bebé de 6 meses y ya tiene una rutina establecida. Pero antes de tener a mi bebé y hasta ahora, soy del club de las 4 de la mañana. A las 4 de la mañana ya estoy despierta y calculen que a las 8 de la mañana ya tengo la mitad del día resuelta, ya que siento que soy más productiva en la mañana que en la tarde o noche. Ahora que soy mamá, cualquier espacio que me den para dormir es bienvenido, pero sigo siendo del club de las 4, ya que siempre he dormido poco. Así que comienzo mi día cuidando a mi hijo Salvador, luego hago una lista de actividades del día apenas me levanto para no olvidar nada. No sé si ustedes lo hacen pero a mi me sirve mucho, en estas notas incluyó todo lo urgente y prioritario. Después de levantarme, preparó la ropita del bebé para cuando se despierte de nuevo a las 7 de la mañana, me baño, revisó el computador, y tomó mis vitaminas. Desde casi después del embarazo quedé con problemas de caída de cabello y demás, por eso tomó tantas vitaminas. Empiezo a organizar y avanzar mucho con mis tareas. Mi equipo puede decir que recibe correos míos desde las 4:30 o 5 de la mañana, pero a las 6:30 ya estoy lista. Luego llega la persona que nos ayuda con las labores de la casa, desayunamos y, si no tengo que viajar ni tengo otros compromisos, me dirijo a la oficina para liderar al equipo. Durante el día, vuelvo a casa y no todos los días son iguales. Duermo poco, hago mis notas diarias, organizó a mi hijo y trabajo en la fundación. Hoy estoy disponible, pero mañana no lo estaré, y el miércoles viajaré a Bogotá todo el día por reuniones. Luego, otro evento de lanzamiento, y el jueves tengo que ir a grabar. No puedo decir que tengo una rutina específica, ya que cada día es diferente.

PC: ¿Qué es lo más valiente que has hecho? 

NS:Ser mamá es una valentía innegable. Imaginen que yo no podía serlo y tuve un embarazo de alto riesgo. Decidir seguir adelante con mi bebé fue una determinación difícil pero obvia. También, uno de los actos más valientes que he realizado fue organizar un foro durante un paro nacional armado del ELN. Convocamos a 200 líderes y víctimas, a pesar de las advertencias del ejército sobre exacerbar la situación. Eso fue lo más valiente que he hecho, me sacaron hasta en ambulancia. Es arriesgarse a hacer cosas que la gente a menudo evita por miedo. Desde la fundación, otro acto valiente fue organizar un foro en 2019 sin recursos, reuniendo a empresas de todo el mundo, yo en mi mente decía tiene que salir. Aunque parecía imposible, lo logramos y ahora es uno de los más grandes en América Latina.

PC: ¿A qué mujer admiras y por qué? 

NS: Admiro profundamente a Adriana Ocampo. Tiene una historia espectacular. El año pasado, salió a la luz su trayectoria como una de las directivas de la NASA. Aunque su historia no fue tan mediática, conocí su historia y me identifiqué con ella; cómo salió de su país en circunstancias difíciles y se abrió camino en áreas tradicionalmente dominadas por hombres, como STEM. Llegó a Estados Unidos y desempeñó roles completamente diversos, alcanzando uno de los puestos más altos en la NASA como directora de ciencias de la tierra en la sede de Washington. La admiro por su sencillez, calidez y por ser tutora de niñas, llamándonos y escribiéndonos. Su historia de vida es inspiradora, alcanzar tales logros la convierte en un modelo a seguir. Es la mujer que más admiro en este momento.

PC: ¿En qué o en quién crees? 

NS: Creo en la Virgen de Guadalupe, mi morenita. Soy muy católica, aunque no tan practicante como quisiera. Ella ha realizado muchos milagros en mi vida. También creo firmemente en el poder de la mente, al cien por ciento. Esto me ha ayudado a no encontrar límites en nada. Cuando mi equipo se ríe, les digo: "sí se puede, sí se puede". Hay un gran poder en la mente, creo firmemente en eso y en la Virgen de Guadalupe. He vivido experiencias que parecían imposibles, y soy fervorosa en mi devoción hacia ella.

PC: Eres una mujer que se destaca y brilla en diferentes roles como mujer, como madre mi familia empresaria ¿Cuál es la clave para lograrlo?

NS: Entender que no puedes hacer de todo todo el tiempo es fundamental. A menudo nos colocamos la etiqueta de Superpoderosas y, al final, terminamos agotándonos. Aunque tenemos múltiples roles, debemos aceptar que no podemos destacarnos en todos. Cuando comprendes esto, brillas en cada uno de ellos porque delegas responsabilidades, cuentas con redes de apoyo y permites que otras personas también destaquen. Por ejemplo, en la fundación, con un equipo de trabajo sólido, puedo delegar y compartir el liderazgo. Esto es crucial en mi papel como madre; no estoy sola, mi pareja comparte la responsabilidad de la crianza. No se trata de que me esté ayudando, sino de ejercer juntos la paternidad. Este enfoque me permite disfrutar al máximo de mi hijo sin sentir culpa ni la necesidad de resolverlo todo. Como empresaria y emprendedora, abordó los problemas uno a la vez, lo que evita que me sature con múltiples preocupaciones. Mantener el equilibrio significa comprender que no puedes hacerlo todo sola. Aunque nos vendan la idea de que podemos con todo, en realidad necesitamos una red sólida de apoyo y colaboración para destacar en todas nuestras áreas. De nada sirve que tu vida personal esté terrible y acá en el trabajo estés brillando, podemos tratar de que sean las dos y equilibrarnos. Si descuidamos una parte de nuestra vida, afectará inevitablemente a las demás. Por tanto, es crucial encontrar ese equilibrio y reconocer que no podemos hacerlo solas.

PC: ¿Cuáles son para ti  tus tres o  cuatro pilares del éxito?

NS:Primero, que los principios y la ética son inquebrantables. Nada ni nadie debería hacer que ajustes tu visión, ética o valores. La integridad debe ser tu compañera constante, asegurándote de hacer las cosas correctamente y reconociendo qué es negociable y qué no lo es. Otro principio importante es abordar los problemas uno a la vez. A veces, erróneamente creemos que el éxito consiste en enfrentar todos los problemas a la vez, cuando en realidad es mejor resolverlos uno por uno. Además, es crucial entender la importancia de pasar el liderazgo a otros. Otra de las cosas que me han acompañado es que hay que pasar y hacer relevos de liderazgo, esa es la clave. Debes tener personas que te sigan, que aprendan y que lo hagan mejor que tú y así te rodeas de los mejores para que tu propósito de vida funcione. La última es tener una estructura muy clara sin perder de vista tus objetivos. A veces nos pasa que nos perdemos en la planificación sin acción o en abarcar demasiado sin comprender realmente qué queremos lograr, lo que resulta en una pérdida de tiempo y recursos. Mantener el enfoque en la meta que deseas alcanzar es fundamental para el éxito a largo plazo.

PC: ¿Qué es lo mejor que te has llevado de la fundación?

NS: Uy las 75 sonrisas de mis hijas adoptivas y las miles de mamás son lo mejor que tengo. Sentir que tengo más mamás e hijas en el mundo es una bendición indescriptible. La felicidad de acostarme tranquila, sabiendo que estoy haciendo lo correcto, y despertar con un corazón pleno no tiene precio. Creo sinceramente que esta conexión es lo mejor que me ha sucedido. Trabajar en la fundación me ha enseñado el poder de la transformación y la resiliencia. Ver a las niñas y a las mujeres superar las historias más desgarradoras y viéndolas seguir adelante con una sonrisa llena de gratitud es lo más hermoso que he presenciado. Por ellas, por su amor y su fuerza, todo vale la pena en la vida.

PC: De todo lo que has aprendido de la fundación ¿Cuál es el mejor consejo que le puedes dar a una mujer? 

NS: Uno de los mayores aprendizajes que he obtenido en la fundación es el derecho a merecer. Muchas mujeres tienden a sentirse culpables y piensan que no merecen ciertas cosas, que no se reconocen a sí mismas. Creo firmemente en el derecho a merecer y a reconocernos, lo cual nos impulsa más allá del ego y la autopercepción de nuestro valor. Es importante recordar que nuestro trabajo también merece ser reconocido, y esto no tiene que ver con egoísmo, sino con amor propio y reconocimiento a nuestros esfuerzos. A lo largo de estos 8 años, he comprendido que el derecho a merecer también se aplica a nuestras acciones y contribuciones. En segundo lugar, he aprendido que la calidad humana debe primar sobre cualquier título, sueño u objetivo. He visto a muchas personas en las que no quería convertirme, personas que priorizaban los logros materiales sobre las relaciones humanas. Los títulos pueden ser importantes, pero lo que realmente importa es cómo tratamos a los demás y cómo nos recuerdan por nuestra compasión y empatía. La calidad humana y la simpatía son clave para lograr el éxito en cualquier ámbito, mientras que su ausencia puede cerrar puertas.

PC: ¿Por qué She Is? ¿Cómo nació este sueño?

NS: Hace más de 8 años, en 2015, me mudé a Estados Unidos para trabajar en Washington. Entré al Banco Interamericano de Desarrollo (BID), donde pasé tres años en un sector bastante aburrido que se centraba en integración y comercio. Sin embargo, surgió la oportunidad de crear un proyecto para el sector social, lo cual resonaba profundamente con mi formación y valores familiares. Viniendo de una familia comprometida con el servicio y la docencia, siempre había querido trabajar en proyectos sociales. Durante mis años universitarios, participé en voluntariados y pasantías, incluso trabajando con niños afectados por pandillas en Guatemala. Sentí que esta oportunidad me llenaba más que mi trabajo en el BID, así que concebí un proyecto llamado "She is", un modelo integral para proporcionar herramientas y apoyo a mujeres víctimas del conflicto armado en Colombia. Me cuestionaba por qué las mujeres, a pesar de ser las más afectadas, no tenían voz en las mesas de negociación de paz. Por lo tanto, decidí crear un proyecto social que pudiera tener un impacto real en esta población olvidada. El nombre "She is" surgió como una declaración de reconocimiento y visibilidad para todas las mujeres, especialmente las madres cabeza de familia víctimas de la guerra. A pesar de que mi proyecto fue rechazado en el BID, una de mis jefas me alentó a seguir adelante con la idea. Luego, decidí presentarlo al programa de emprendedores emergentes de la Casa Blanca, creado por Barack Obama en ese entonces. Fui seleccionada junto con otras 10 emprendedoras de todo el mundo y viajamos a Kenia para la Cumbre Mundial de Emprendimiento. A pesar de que mi proyecto aún era solo una idea, renuncié a mi trabajo en el BID y regresé a Colombia para fundar "She is". Empecé a viajar por todo el país para documentar las historias de las mujeres con las que quería trabajar, y me di cuenta de que no estaba tan equivocada en mi visión.

PC: ¿Qué planes tienes a futuro con la fundación?

NS: Actualmente estamos experimentando un emocionante período de crecimiento acelerado en la fundación. Este crecimiento ha sido el resultado del impacto positivo al replicar y expandir cada una de nuestras líneas de acción. La fundación se basa en cuatro líneas de acción, diseñadas para abordar oportunidades específicas en Colombia y América Latina. La primera línea, llamada "Esmeralda", en honor a mi madre, se centra en empoderar a mujeres en toda Colombia a través de cuatro centros que hemos construido para ayudarles a superar las trampas de la pobreza. Estamos emocionados por continuar expandiendo esta iniciativa y abrir más centros en el futuro. Actualmente estamos planeando abrir nuestro cuarto centro en Baranoa, Atlántico.

La segunda línea, llamada "Ella Es Astronauta", es un programa pionero en colaboración con la NASA, destinado a niñas en extrema vulnerabilidad. Hasta la fecha, hemos impactado a 715 niñas y hemos otorgado becas a tres de ellas para que puedan continuar sus estudios universitarios. Este programa es significativo no solo porque inspira a las niñas, sino también porque garantiza su educación superior en áreas STEM, tradicionalmente dominadas por hombres. Tenemos planes de expandir este programa a más países y alcanzar a más niñas en Colombia.

La tercera línea, "Ella Es Gaviotas de Paz", se enfoca en abordar la violencia de género. En lo que va del 2024, hemos registrado más de 336 casos de violencia física y agresión. Trabajamos para informar a las mujeres sobre sus derechos y brindarles el apoyo necesario para denunciar estos actos de violencia. Nuestro objetivo es llegar a más regiones de Colombia para concientizar sobre este problema y proporcionar recursos a las víctimas.

La cuarta línea es nuestro foro, que este año celebra su sexta edición. Nuestra meta es ampliar su alcance y convertirnos en el principal movilizador en América Latina por la equidad de género. El año pasado, reunimos a 5000 asistentes en tres días. Seguimos fortaleciendo esta iniciativa para inspirar y brindar oportunidades a mujeres y hombres para discutir sobre equidad de género y promover el emprendimiento. Estamos comprometidos con esta apuesta y seguimos trabajando con entusiasmo para alcanzar nuestras metas.

PC: ¿Alguna vez te has sentido derrotada o frustrada? ¿Cómo has logrado superar estos momentos? 

NS: Muchísimas o sea todavía me acuerdo y me dan ganas de llorar. Sobre todo iniciando, hice hojas de vida muchas veces y al otro día las rompía porque tenía tan claro mi objetivo con la fundación que no podía desviar la atención por más fracasos que tuviera o por más decepciones. Quiero nombrartelos en cuatro líneas importantes: el primero, en temas de estereotipos, cuando llegué, nadie me creía ni me tomaba en cuenta debido a mi estatura, me trataban como a una niña. Aunque ahora tengo cara de mamá, hace unos 7 u 8 años me veía demasiado joven y eso me llevaba al rechazo. Todavía hoy, algunos líderes, cuando se sienten amenazados, me tratan de niña, como si fuera una especie de discriminación. Sin embargo, siempre respondo que lo mejor que me han dicho es que sea como una niña, porque una niña es genuina y valiente. Es un tema de estereotipos muy fuerte que he tenido que enfrentar. Otra línea donde me he sentido muy frustrada es cuando tengo casos muy cercanos de violencia de las mujeres y no poder hacer nada. He tenido que enterrar hijas de mis mujeres, he tenido que navegar para que se le respeten los derechos a mis niñas menores de edad que son abusadas sexualmente por sus papás, eso sí que me ha frustrado porque no ha servido mover cielo y tierra para lograr garantizar los derechos o por lo menos un éxito judicial de sentenciar al agresor.  El tercero y el más fuerte que he tenido que afrontar ha sido más allá de romper los estereotipos, es de entender cuando las personas literalmente te maltratan porque piensan que no tienes la capacidad. Me ha tocado manejar gente muy dura, no se imaginan y eso frustra, eso puede acabar con una persona. Si uno no fuera tan fuerte deja su sueño, permite precisamente que violenten tus procesos. Hay que entender que en este sector social la competencia no existe, existe una co creación y dialogos sociales importantes por que vamos a beneficiar. Pero hay ciertos actores que no lo ven así, lo ven como una competencia, es decir que su propósito no está claro. Eso para mi ha sido muy frustrante lidiar porque hacen maldades. Entonces, ¿Cuál ha sido la mejor forma de enfrentar estos tres? Blindarse emocionalmente, es entender que no estás trabajando para que te aplaudan, nunca desviarte de tu objetivo. Siempre lo hablo con el equipo, entre más piedras te tiren tienes que convertirlas en semilla para que crezcan como un arma. Para mi lo más importante es trabajar 100 veces más cuando sientes una frustración, al otro día levantarte y poner todo el poder de la mente en trabajar 100 veces más para hacerlo realidad. No todos los días podemos estar positivos, no todos los días podemos estar sonriendo, pero tú eliges la manera en que afrontas ese desafío o ese problema. Yo siempre he decido que cualquier desafío o problema lo lloró en su momento pero al otro día ya tengo que tener 20 soluciones o 20 formas de saberlo hacer y yo creo que eso diferencia mucho a varias personas porque a veces nos dejamos consumir en la forma en que afrontamos esas derrotas. Una derrota, el lugar en el que nacemos o problemas que se nos presentan no nos definen.

PC: ¿A qué quisieras atreverte? 

NS: ¡Ay Dios mío, no sé por dónde empezar! Pero recuerdo una conversación con mi equipo durante la planificación de este año. Les dije que quería atreverme, precisamente esa fue la palabra, a abrir espacios en África con dos países para el programa de “Ella es Astronauta”. Quiero llevar la marca Colombia a otras esferas, expandir nuestros horizontes. Eso es a lo que quiero atreverme, a desafiar los límites y a lanzarme a lo desconocido. Quiero atreverme a volver a estudiar, a explorar otros campos que me fascinan, como el área de las ciencias y la tecnología. Hay muchas cosas a las que me gustaría atreverme. Desde abrir nuevos horizontes en África hasta retomar los estudios en campos que me apasionan. Estoy lista para enfrentar los desafíos y seguir creciendo, tanto personal como profesionalmente.

PC: ¿Cómo te ves en 10 años? 

NS: Espero no haber envejecido tanto. No sabes cómo me veo, más descansada, más tranquila. Sabes, si quieres resultados, tienes que trabajar el doble, ¿no es así? Así que mucho más tranquila en cuanto al trabajo, incluso con mi hijo, viajando por el mundo y compartiendo nuestra historia. Me encanta ver cómo nuestras acciones dan frutos, como esas primeras graduadas de universidad. ¡Ay, no! Ya me imagino en tres años, viendo a las primeras graduadas. Es un sueño hecho realidad.

PC:¿Qué es lo más poderoso que te ha enseñado la maternidad?

NS: Hasta ahora, ¡uf! Dios mío, no tener control absoluto sobre nada, es un reto constante. Ser muy resiliente, pero también ser compasiva conmigo misma, eso es lo más poderoso. Porque soy una persona que se estructura mucho, me cuestiono mucho, entonces la maternidad me enseñó a tener compasión conmigo misma. Pero también me ha brindado una sensibilidad a flor de piel y un cuidado profundo por los niños. No estoy desbordada con esto, pero definitivamente es un desafío constante

PC: ¿Qué consejo le das a las mamás primerizas que son empresarias cómo lo has hecho tú? 

NS: Es importante recordar que no podemos abarcarlo todo al mismo tiempo, como yo misma aprendí. Casi me vuelvo loca durante los primeros tres meses tratando de equilibrar la maternidad y la empresa. Es una presión que no podemos sostener. Entonces, darse tiempo, confiar, soltar y delegar son los mejores consejos para una mamá primeriza y empresaria. Como dice el cuento, el bebé crecerá, pero el trabajo siempre estará ahí.

PC: ¿Dedicas tiempo solo para ti? ¿Cómo te consientes?

NS: Me he culpado mucho por esto, pero estoy aprendiendo a equilibrarlo. Por ejemplo, he establecido que los martes y jueves son sagrados para pasar tiempo con mi hijo; esos días no vengo a la oficina. Si tengo que viajar, me aseguro de llevarlo conmigo, y su papá también está muy consciente de ello. Aprovecho esos momentos para disfrutar de cosas que me gustan, como recibir masajes. Incluso algo tan simple como hacerme las uñas se convierte en un momento especial que antes podría haber pasado por alto debido al afán. He aprendido que priorizarme a mí misma es esencial, porque si no estoy bien, el resto tampoco lo estará. La distribución del tiempo, incluyéndome a mí misma, se ha vuelto una prioridad, y eso ha marcado una gran diferencia en mi vida.

PC:¿Qué te hace ser Nadia? Si pudiéramos sacar tu esencia qué es lo que te hace ser tú?

NS: ¡Ay no! Esa pregunta deberías hacerla a mi equipo, seguro se reirán. Ellos te dirían que soy muy auténtica, colorida y linda. No veo límites en nada y me encantan las relaciones humanas. A veces, para mí, ni mis patrocinadores ni mis clientes son simplemente eso, sino que se convierten en parte de mi familia y me tratan como tal. Creo que eso es lo que me define en este medio. Me dicen que soy muy "Nadia", y eso significa que entienden cuál es mi esencia y cómo soy.

PC:  ¿Cuál es ese lema de tu vida o esa frase que te da impulso?

NS: Tengo dos que repito constantemente y que son fundamentales para mí, las cuales también vivimos y llevamos en el ADN de la fundación. La primera es la idea de hacer posible lo imposible, algo que he experimentado en carne propia. La segunda es que nuestro trabajo debe transformar a esas niñas y mujeres invisibles en seres invencibles.

PC:¿Cuál es tu placer culposo?

NS: Comer arequipe en todas sus presentaciones todos los días a toda hora. En pocas palabras, el dulce. 

PC: ¿Cómo terminas tu día?

NS: Llegó a la casa a las 7 de la noche cuando comienza la rutina con Salvador. Si estoy viajando estoy pendiente de su rutina para dormir. Antes de irme a dormir, siempre leo un poco y le dedico dos horas a responder mensajes de WhatsApp porque me quita mucho tiempo. Intento no dejar mensajes sin contestar, a veces es difícil. Por eso, paso un par de horas antes de dormir respondiendo mensajes para no dejar a nadie sin respuesta. Esto es parte de mi rutina diaria, muchas veces la gente no comprende si no contestas, así que trato de mantenerme al día con esto. Si ya termine de responder pongo un podcast o video.